Cuando abordamos el tema de precios de transferencia es común que la referencia principal que se utilice sean las guías de la Organización para la Cooperación del Desarrollo Económico (Guías de la OCDE), comúnmente con base en las disposiciones legales de cada país que regulan las operaciones entre partes relacionadas.
Sin embargo, considero necesario recordar que la base del análisis para demostrar que las transacciones realizadas entre empresas relacionadas es la información financiera de las entidades en cuestión, teniendo estas que cumplir con normas contables que permitan obtener información confiable.
Es importante considerar que, según el país del que se trate, existen regulaciones específicas respecto a las normas contables que deben adoptarse. Independientemente de lo anterior, cuando se trata de postulados contables, la base principal de estos son las Normas Internacionales de Información Financiera (NIIF o IFRS, por sus siglas en inglés), existiendo un interés general en que estos sean adoptados por las compañías para efectos de buscar homologar criterios en la presentación de estados financieros.
No obstante, es común encontrar en la actualidad empresas que sigan registrando sus operaciones con base en Principios de Contabilidad Generalmente Aceptados (PCGA), debido a la falta de normas que hagan general la adopción de NIIF o bien, los altos costos y de tiempos que se deben invertir en dicha adopción.
¿Por qué es importante conocer lo anterior? La premisa principal para probar que una transacción intercompañía se encuentra a valor de mercado es el principio de plena competencia. Este se basa en comparaciones con base en transacciones realizadas entre terceros independientes, y en muchas ocasiones para la aplicación de algunas metodologías de precios de transferencia es necesario realizar un análisis del estado de resultados para obtener la rentabilidad bruta u operativa de la empresa bajo análisis, y comparar estas con las rentabilidades de empresas comparables.
Este elemento de comparabilidad es difícil lograrlo si la empresa analizada y las empresas comparables utilizadas parten de una base contable distinta, ya que se obtendrían resultados poco confiables.
Es necesario que el asesor o analista de precios de transferencia del grupo empresarial determine si existen las diferencias antes mencionadas para realizar los ajustes que considere necesarios o bien, en caso de no poder realizarlos por falta de detalle en la información financiera, que en las premisas del estudio establezca notas relacionadas a la imposibilidad práctica de encontrar mejores referencias de comparación.
De lo anterior, es clara la necesidad de que el experto conozca los postulados principales de las NIIF, entre los que encontramos aquellos relacionados con:
En conclusión, es importante que como especialistas nos tomemos el tiempo de conocer las NIIF para tomar buenas decisiones en lo que respecta a las premisas utilizadas en nuestro análisis de precios de transferencia, esto debido a que existen diversos supuestos cualitativos y cuantitativos que pudieran alterar nuestros resultados por el simple hecho de no partir de una base homóloga en lo que se refiere a información financiera.
Es importante tener asesoría de expertos y profesionales, si tienes alguna duda y deseas atención personalizada, no dudes en contactarnos. Para mas información sobre nuestros servicios, visita nuestra página.
Las opiniones expresadas en este artículo son de exclusiva responsabilidad del autor y no necesariamente representan la opinión de Grupo Consultor EFE™.
Este sitio web utiliza cookies para mejorar la experiencia del usuario.
Al utilizar nuestro sitio web, acepta todas las cookies de acuerdo con nuestras Políticas de privacidad.