¿Tu plan principal es construir una empresa valiosa?

La verdad es que no es imposible, pero sí necesitas asegurarte de que ese negocio pueda operar de manera independiente sin tu participación permanente.  

Aquí te presentamos 3 simples estrategias rentables para que tu emprendimiento o empresa, puedan dirigirse hacia un destino de autonomía de manera prospera sin la necesidad de tu presencia constante.

1. Reemplázate a ti mismo... especializándote.

2. Crea un diario de preguntas.

3. Lista a tu equipo alfabéticamente en tu sitio web. 

Seguramente ya has notado que la mayoría de las empresas enumeran a sus empleados por antigüedad, con el propietario y CEO como los primeros en la lista.
¡No! No cometas este error, solo lograrás comunicar que eres la persona más importante en tu empresa, generando que los vendedores, proveedores y posibles socios quieran dirigirse a ti directamente siempre.
Una estrategia efectiva para minimizar tu papel en la empresa (haciendo que otros asuman más responsabilidades), es enlistar a los empleados alfabéticamente en lugar de por antigüedad en el sitio web de tu empresa. De este modo, en solo un movimiento, minimizarás el protagonismo sobre ti.
Además, el uso de títulos como “jefe de cultura” o “jefe de producto”, en lugar de “CEO” o “propietario”, puede disminuír aún más esa atención no deseada sobre ti, haciendo menos probable que los clientes te llamen por defecto. 

Liberar el potencial de tu negocio para funcionar de manera autónoma no solo es posible, sino también estratégico. Al especializar tu oferta, documentar procesos y descentralizar responsabilidades, puedes construir un emprendimiento robusto y sostenible. Rompe con la idea de que tu presencia constante es esencial y permite que tu negocio florezca sin depender exclusivamente de ti.