Una pregunta muy frecuente que tienen las personas que pretenden iniciar algún trámite en cuanto a la protección y registro de sus marcas y patentes es precisamente el confundir ambos conceptos. Si tienes la idea de que ambos conceptos son lo mismo, aquí te dejo las principales características y diferencias de cada uno de ellos:

MARCAS

Cuando nos referimos a las marcas y su registro, debemos mencionar que la ley que las regula es la Ley Federal de Protección de la Propiedad Industrial.  

El registro de marca constituye la inscripción y concesión de derechos sobre denominación de las marcas, logotipos, slogans, nombres comerciales o avisos, es decir, constituye en su mayoría el tema visual o publicitario. Es importante mencionar que esta lista no es exhaustiva, los derechos que se protegen son más amplios conforme a la ley. La ley en su artículo 171 lo define de esta manera:

“Artículo 171.- Se entiende por marca todo signo perceptible por los sentidos y susceptible de representarse de manera que permita determinar el objeto claro y preciso de la protección, que distinga productos o servicios de otros de su misma especie o clase en el mercado”.

Si analizamos el concepto y el ejemplo proporcionado, podemos concluir que la marca es un concepto más visual. En este sentido, cuando hablamos de marca, si tienes un logotipo, denominación, slogan y demás, este es el registro que te corresponde.

PATENTE  

El registro de una patente se regula por la misma ley antes mencionada. Sin embargo, se trata de una creación, invención, procesos, etc., es decir que podemos analizarlo como la parte interna de la propiedad industrial.

En cuanto a las patentes, conforme a lo descrito, podrás darte cuenta de que no aplica siempre, es decir, a menos de que el proceso que hayas utilizado para la creación de tus productos o servicios sea 100% original, es decir, que haya una innovación, podemos hablar de un registro de patente. En cambio, la marca, los productos y servicios que se registran son para clasificarlos adecuadamente y poder proceder con el registro de marca. Por supuesto que la denominación, logotipo, etc. deben ser únicos para que no exista confusión entre marcas, sin embargo, no se trata de un proceso o producto totalmente inédito.

Es importante mencionar que no significa que si quieres registrar una marca no puedes registrar también una patente. Siempre y cuando se cumplan los elementos, puedes llevar a cabo ambos trámites dependiendo de tu caso concreto.

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